Venezuela se encuentra actualmente en un callejón sin salida político. Maduro, cuya legitimidad es contestada desde hace cuatro años, intenta mantener la herencia chavista sin éxito. Chávez murió hace ya tres años y con él murió una concepción del poder. En un país profundamente divido, el poder venezolano deberá escuchar la voz del otro Venezuela, el que pide este referéndum revocatorio rechazado por Maduro. Resulta obvio que cualquier evolución política pasará por el fin del madurismo y un restablecimiento de los valores democráticos. Tampoco se puede olvidar que Venezuela ya no cuenta con tantos aliados latinoamericanos como antes, sus vecinos están evolucionando y tarde o temprano Venezuela deberá seguir sus pasos.
Por otra parte, la economía venezolana deberá adaptarse a los nuevos retos. El sistema monoproductivo que, en su momento, dio resultados, muestra ahora sus límites. El crecimiento económico futuro pasará por una diversificación del modelo productivo así como un reforzamiento de la clase media para estimular el mercado interior. El fracaso del neo socialismo traerá una liberalización de la economía y el fomento de la iniciativa privada para compensar los fallos del gobierno.
No obstante, no todo está en las manos de los políticos y economistas, el pueblo también deberá asumir sus responsabilidades. Venezuela no avanzará mientras haya tanta división entre la población, el país deberá reparar la brecha hecha por Chávez, ampliada por Maduro y reconciliar los enemigos de ayer para encaminarse hacia un futuro común y prometedor. 240 palabras
